Prologo.

¿Puedes sentir los latidos de mi corazón?

No puedo dejarte ir, te quiero y te necesito en mi vida.

“Dolía demasiado como para poder resistirlo, quería gritar, quería correr y esconderse, quería cerrar los ojos y no ver esa escena más, sentía como si lo golpearan una y otra vez a la altura del pecho, la marca del claddagh brillaba en su muñeca mientras las gotas de sangre salpicaban su rostro y su ropa.

La luz rojiza de la luna iluminaba el pequeño espacio y la suave melodía que provenía de las aguas del lago le hundía como en un ensimismamiento pero podía escuchar claramente sus gritos, podía oler su piel quemada, podía sentir su cuerpo entre sus brazos retorcerse por el dolor mientras sus delicadas manos se aferraban a su negra camiseta.

“No mas, por favor, ¿Qué no ven que la lastiman?... ¿Qué no ven que con ella me muero yo?” las palabras permanecían en su mente, un nudo en su garganta le impedía gritar y rogar para que se detuvieran, para que dejaran de lastimarla.

Podía sentir como el lazo que los unía se rompía poco a poco, como su corazón se desmoronaba cada segundo un poco mas, como la vida de ella abandonaba su cuerpo y como la tristeza inundaba su alma ahora solitaria... Un último grito agudo, la ultima exclamación de dolor, los últimos latidos de su corazón y su último suspiro y de golpe; así como su llegada a su vida; todo termino.

-- Ya esta, Derek – la voz sonó lejana y desconocida – Su sangre ya ha sido derramada y su alma ya ha pagado por su pecado… Ya esta muerta y es hora de dejarla ir.

Sus rodillas chocaron con el suelo, su corazón latía demasiado lento y su mente aun no terminaba de procesar que ella ya no despertaría; que sus ojos ya no brillarían ante la emoción de algo desconocido, que ya no le dedicaría esa sonrisa inocente; apretó su herido cuerpo contra su pecho, el frío calaba sus huesos y su cuerpo se sentía pesado y cansado, pero no quería soltarla, no quería que terminaran de arrebatársela, las lágrimas inundaron sus ojos y la oscuridad comenzó a rodearlos… Estaba muerta, “Muerta, muerta, muerta…” la palabra se repetía una y otra vez dentro de su mente mientras un fuerte y agudo dolor le quitaba la respiración, cerró los ojos y se dejo llevar por el dolor y la tristeza… Ya nada se la regresaría.”

Abrió los ojos de golpe, un dolor recorría su cuerpo por completo y una extraña sensación de vacío inundaba su pecho mientras el trataba de controlar su agitada respiración. Había sido un sueño extraño, podía jurar que había sentido que era real, que verdaderamente estaba sucediendo, que sostenía el cuerpo de una chica contra el suyo y que le dolía su muerte… Pero no sabia quien era la chica, ni siquiera había visto su rostro. Se paso la mano derecha por su desordenado cabello negro y un pequeño rayo de dolor le sorprendió en la muñeca. Abrió los ojos atónitos al notar la marca rojiza que dibujaba un pequeño claddagh, se levanto de golpe mientras sentía las gotas de sangre resbalar por su mejilla y empapar su pecho desnudo… Una sensación de terror le embargo y el presentimiento de que algo malo se precipitaba sobre el llego a su mente.

(...)

La parte 1 del prologo.

Espero les guste.

Un beso.
Lu